5 Tips para el Control de Moscas Blancas
Antonio Ortiz Álvarez
Ingeniero Agrónomo, Magister en Ciencias Agrarias
Director Unidad de Educación ENTOMA
Las moscas blancas son una plaga común en muchos cultivos, causando daños significativos a las plantas y reduciendo la calidad y cantidad de la cosecha. Estos diminutos insectos pueden multiplicarse rápidamente y pasar a ser de difícil de controlar si no se implementan las estrategias adecuadas. Aquí te presentamos cinco consejos efectivos para mantener a raya a las moscas blancas y proteger tus plantas.
TIP 1: Realice monitoreo frecuente en el envés de las hojas.
Las moscas cumplen todo su ciclo en el envés de las hojas, donde depositan sus huevos y se alimentan de la savia de las plantas. El monitoreo regular de este lugar es crucial para detectar la presencia temprana de la plaga y tomar medidas preventivas a tiempo.
¿Por qué?
Las moscas blancas prefieren el envés de las hojas debido a su protección contra depredadores y condiciones climáticas adversas. Además, es donde se desarrollan las ninfas, las cuales son más vulnerables a los tratamientos, especialmente las recién nacidas.
Recomendación
Utilizar una lupa para examinar cuidadosamente el envés de las hojas y detectar cualquier signo de infestación. Realizar los monitoreos preferiblemente cada 7 días, dependiendo del tamaño de la población y las condiciones ambientales. Actuar rápidamente si notas la presencia de moscas blancas.
TIP 2: Dirija las aplicaciones fitosanitarias al envés de las hojas.
Las aplicaciones de productos fitosanitarios son una herramienta importante en el control de moscas blancas. Sin embargo, es crucial dirigir los tratamientos al envés de las hojas, donde las moscas blancas suelen estar más activas.
¿Por qué?
Las moscas blancas pasan la mayor parte de su tiempo en el envés de las hojas, alimentándose y reproduciéndose. Aplicar los productos fitosanitarios en esta área garantiza una mayor eficacia en el control de la plaga.
Recomendación
Realizar aplicaciones fitosanitarias al haz y el envés de las hojas, sobre todo si se está utilizando un insecticida, ya sea de síntesis química o extracto vegetal, actúa por contacto directo, así como hongos entomopatógenos. Utiliza productos fitosanitarios específicamente diseñados para el control de moscas blancas y sigue las instrucciones de la etiqueta y de aplicación cuidadosamente para evitar daños a las plantas o contaminación ambiental.
TIP 3: Use trampas de color amarillo para el monitoreo y control.
Las trampas de color amarillo son una herramienta efectiva para el monitoreo y control de moscas blancas. Estas trampas atraen a las moscas blancas con su color y quedan atrapadas con el pegante, lo que ayuda a reducir la población y prevenir la propagación de la plaga.
¿Por qué?
Las moscas blancas son atraídas por el color amarillo, por lo que las trampas de este color resultan altamente efectivas para su captura. Esto es posible, debido a que los ojos de las moscas blancas solo perciben longitudes entre los 500 y 600 nm. Su uso adecuado permite monitorear la actividad de la plaga y tomar medidas de control adecuadas.
Recomendación
Usar trampas con longitudes de onda cercanas a 550 nm que corresponde al amarillo. Colocar las trampas de manera estratégica alrededor de tus cultivos, especialmente en áreas propensas a la infestación. Inspeccionar regularmente las trampas y reemplazar los adhesivos cuando sea necesario, según las instrucciones del proveedor.
TIP 4: Realice manejo cultural: podas fitosanitarias y manejo de arvenses.
El manejo cultural de los cultivos es fundamental para reducir la incidencia de moscas blancas. Esto incluye prácticas como la poda fitosanitaria para eliminar partes de la planta infestadas y el manejo de arvenses para eliminar posibles hospederos alternativos de la plaga.
¿Por qué?
La poda fitosanitaria ayuda a eliminar las partes de la planta que pueden servir como refugio para las moscas blancas, reduciendo así su población. Los huevos y las ninfas permanecen adheridas en el envés de las hojas y son un objetivo fácil de manejar mediante la poda de hojas con alta infestación de estos estados de desarrollo.
Adicionalmente, las moscas blancas son polifitófagas, es decir, se alimenta de numerosas especies de plantas de diferentes familias, por lo que muchas de las arvenses o plantas acompañantes del cultivo pueden ser una fuente de alimento y refugio de las mismas, lo cual mantiene un inóculo de moscas blancas que posteriormente pueden pasar a las plantas del cultivo.
Recomendación
A partir del monitoreo, identifique los puntos críticos de mayor infestación de estados inmaduros de las moscas blancas. Posteriormente, realice una poda selectiva en las áreas afectadas, priorizando aquellas con una alta concentración de ninfas. Es crucial disponer adecuadamente de este material podado para evitar su reintegración a las plantas del cultivo.
Además, se recomienda eliminar las plantas hospederas de moscas blancas y desechar estos residuos lejos del área de cultivo. Esta medida ayuda a reducir la disponibilidad de hospederos alternativos para la plaga. En combinación con estas acciones, es posible emplear insecticidas de síntesis química y trampas de color amarillo para controlar y capturar las moscas blancas que puedan emerger del material eliminado.
TIP 5: Conservación de enemigos naturales.
Los enemigos naturales, como artrópodos depredadores y parasitoides, al igual que microorganismos entomopatógenos como los hongos, desempeñan un papel importante en el control biológico de las moscas blancas. Conservar y promover la presencia de estos enemigos naturales puede ayudar a mantener bajo control las poblaciones de moscas blancas de manera sostenible.
¿Por qué?
Los enemigos naturales de las moscas blancas, como las mariquitas, crisopas, moscas sírfidas, chinches, entre otros, desempeñan un papel vital en el ecosistema agrícola al alimentarse de estas plagas y sus huevos. Además, los parasitoides, como Encarsia spp. y Amitus spp., controlan las poblaciones de moscas blancas al depositar sus huevos dentro de las ninfas, lo que lleva a su muerte. Favorecer la presencia de estos organismos en el agroecosistema ofrece una solución natural y efectiva para controlar las poblaciones de moscas blancas. Hongos entomopatógenos como Aschersonia aleyrodis son específicos para este grupo de plagas. Géneros como Beauveria, Lecanicillium y Metharhizium, entre otras, igualmente son de alto impacto en sus poblaciones.
Recomendación
Para conservar los enemigos naturales de las moscas blancas, se recomienda implementar prácticas de manejo integrado de plagas. Esto implica reducir el uso de insecticidas de amplio espectro que también pueden afectar a estos organismos beneficiosos debido a su susceptibilidad a estas sustancias. Además, se puede promover la siembra de plantas refugio que proporcionan hábitats y alimento para estos insectos beneficiosos.
Otra alternativa efectiva es el uso de extractos vegetales y microorganismos entomopatógenos específicos para controlar las poblaciones de moscas blancas sin dañar a los depredadores y parasitoides naturales. Esta estrategia de manejo integrado permite reducir el impacto ambiental de los plaguicidas y promover un equilibrio natural en el agroecosistema.
Conclusión
El control efectivo de las moscas blancas requiere un enfoque integral que combine diferentes estrategias, desde el monitoreo y la aplicación de productos fitosanitarios hasta el manejo cultural y la conservación de enemigos naturales. Al seguir estos cinco consejos, puedes proteger tus cultivos de esta molesta plaga y garantizar una cosecha saludable y productiva.